El crucero San Isidro, en la carretera Federal 45, ha sido escenario de múltiples tragedias, y este fin de semana no fue la excepción. Un choque entre un sedán y un tráiler dejó un saldo de tres fallecidos.
Según las autoridades, el accidente ocurrió cuando el conductor del sedán intentó ganarle el paso al tráiler, lo que provocó un impacto fatal. En el lugar todavía permanecen los vestigios de la tragedia: trozos de vehículos, manchas de aceite, y una sábana utilizada para cubrir uno de los cuerpos. Aunque el conductor de la pipa involucrada logró sobrevivir, su unidad sufrió graves daños por un incendio.
A pesar de los señalamientos viales que alertan sobre la necesidad de reducir la velocidad y realizar un alto total, los accidentes en este punto son recurrentes. La comunidad y expertos sugieren que una solución como un puente a desnivel podría prevenir futuras tragedias. Sin embargo, también se subraya la importancia de conducir con responsabilidad y precaución. Este lugar, marcado por numerosas desgracias, demanda atención inmediata para evitar más pérdidas humanas.