Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) han emitido una recomendación para que todas las personas de 6 meses en adelante reciban las vacunas actualizadas contra el COVID-19 y la influenza para la temporada 2024-2025. Estas vacunas están diseñadas para ofrecer protección contra casos graves de ambas enfermedades durante el otoño e invierno. Las vacunas de Moderna, Novavax y Pfizer están disponibles como opciones para combatir el COVID-19.
El virus del COVID-19, que ha evolucionado desde su aparición en Wuhan, China, sigue cambiando, y las variantes actuales son genéticamente diferentes a las versiones anteriores. Esto ha hecho necesario el desarrollo de vacunas actualizadas para ofrecer una mejor protección. Según los CDC, la vacunación no solo puede prevenir infecciones graves y hospitalizaciones, sino también reducir las probabilidades de sufrir los efectos del COVID-19 persistente, que puede durar por un periodo prolongado tras la infección.
Las vacunas contra el COVID-19 del 2024-2025 están diseñadas para restaurar y mejorar la inmunidad, ya que la protección de las vacunas disminuye con el tiempo. Recibir la vacuna actualizada puede ser crucial para combatir las variantes del SARS-CoV-2 que actualmente causan la mayoría de las infecciones en Estados Unidos. Las personas vacunadas durante la temporada pasada (2023-2024) experimentaron mayor protección contra la enfermedad y las hospitalizaciones en comparación con quienes no se vacunaron.
Hasta ahora, cientos de millones de personas han recibido las vacunas contra el COVID-19 de manera segura. Los CDC instan a la población a vacunarse para enfrentar el próximo invierno con una protección renovada tanto contra el COVID-19 como contra la influenza.