La localidad de La Salada enfrenta una significativa migración debido a la falta de oportunidades laborales y preocupaciones por la inseguridad, según informó el delegado José Manuel Ríos Aguilar.
En los últimos meses, alrededor de diez familias han decidido abandonar el pueblo en busca de mejores condiciones de vida, incluso optando por el sueño americano. Esta tendencia ha sido impulsada por la búsqueda de empleo y una mejor calidad de vida, con muchas personas que ahora se dirigen a trabajar en Fresnillo o en otros lugares. Ríos Aguilar destacó que el cambio en la dinámica laboral ha dejado al pueblo con una población reducida, especialmente en el sector agrícola.
A pesar de los desafíos, la situación en La Salada muestra signos de mejora con el reciente aumento de lluvias, lo que ha permitido a los habitantes comenzar nuevas siembras. El delegado mencionó que los sistemas de riego y las precipitaciones están beneficiando las cosechas de productos como chile y tomate. Sin embargo, la falta de mano de obra en el campo sigue siendo un problema, ya que muchos prefieren trabajar en fábricas en Fresnillo, a pesar de que el salario pudiera ser menor.